viernes, 1 de febrero de 2008

Interpretación política

Dadas mis jornadas de reflexión ante una cola o una ventanilla de la administración municipal y habiendo observado unos determinados comportamientos por parte de mis queridos funcionarios, he llegado a una teoría de andar por casa que consiste en: en primer lugar la cercanía de las elecciones puede ser un factor que influya en el servicio por los siguientes motivos: como sabemos los funcioonarios tienen un comportamiento en voto similar al resto de la población, pero se aprecia una tendencia a la izquierda, y / o un apoyo al poder establecido en ese momento, así como un difuso sentimiento de estabilidad que les lleva a creer en la existencia de que otro mundo mejor es posible, un progreso constante de la sociedad y posiciones altruistas típicas de izquierda, por otro lado, la presencia de los grandes sindicatos CC.OO. y UGT, aunque sea mayoritario el independiente CSI-CSIF, hace que elementos altamente politizados como todos sabemos que son los sindicalistas profesionales y simpatizantes, puedan intentar y conseguir soliviantar a sus compañeros a través de determinados resortes que conocen mejor que la timorata derecha, que son la inseguridad, el descontento, el desorden y desorganización, veánse experiencias anteriores como "No a la guerra" o "Nunca Mais", haciéndoles partícipes de un estado de intranquilidad que les lleva a un comportamiento poco cortés (por decirlo de alguna manera), con los ciudadanos a los que prestan servicio, haciendo partícipe al ciudadano de dicho descontento contra los poderes públicos, allá donde interesa, y Madrid, en concreto, es una de las plazas fuertes del PP. Entre otros aspectos, este resorte se activa con la intransigencia en la admisión de documentos, amparándose a la estricta interpretación de las normas de por sí restrictivas, enfocadas a eliminar los coches particulares del centro de la ciudad, haciéndo volver repetidas veces al sufrido ciudadano, que lógicamente, achaca a los representantes electos y cargos públicos su calvario. Siendo especialmente favorable a la izquierda este estado de conmoción ciudadana, ya que crean problemas personales, laborales, y a veces también económicos, que conllevan una movilización masiva, que la izquierda sabe que le beneficia. Y esto lo he pensado, porque el año pasado viví situaciones parecidas en otra abministración, en ese caso la central, relativas a otras elecciones, en ese caso municipales y autonómicas.
Por ello, me gustaría que los responsables políticos estuvieran más atentos a la hora de evitar dichas situaciones, no ya porque perjudiquen objetivamente a los ciudadanos, como debería de ser, sino si quieren por su propio interés, a no ser que, el interés del alcalde, no vaya en la misma línea del PP.