lunes, 16 de junio de 2008

11 de marzo de 2004 (11-M)

El 11-m de 2004 fue un día muy triste para los madrileños y para cualquier persona de bien, la investigación de los hechos ha tenido todo tipo de vicisitudes, muy complicadas, las lagunas son más que las certezas, pero hay una señal inequívoca de que los que siguen investigando, pese a los pasos en falso, van por buen camino, y es que los ataques son tan evidentes como la querella y triste condena a Federico Jiménez Losantos, que espero que apelando consiga ganar.

Pero un hecho que me llama especialmente la atención es que se haya elegido precisamente este tema como elemento de discordia, que no puede ser más que un aviso para navegantes, y eso da miedo. Bastante miedo.

Pena y repulsa siento por el PP, que hasta ahora era mi partido, al que votaba, y del que todavía no me he dado de baja, pero lo haré, por tener a gente como Ruiz Gallardón de dirigentes, que demuestran cómo el poder no tiene pudor ni límites.

Luis del Pino (Madrid, 1962) es Ingeniero de Telecomunicación y colaborador de diversos medios de comunicación como la Cadena COPE, Libertad Digital o CityFM. Interviene habitualmente como contertulio en los programas radiofónicos de City Fm Radio «Tirado en la City», de Juan Antonio Tirado y «Claves de Actualidad» de Javier Castro Villacañas, y en la Cadena Cope «La Mañana», de Federico Jiménez Losantos, y «La Linterna» de César Vidal, y ha publicado artículos sobre el 11-M en Libertad Digital, City FM Radio y la revista Época.

Se ha convertido en personaje popular y controvertido gracias a su bitácora «Los Enigmas del 11-M», en la que puso en cuestión el sumario judicial sobre los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, y posteriormente el desarrollo del mismo.

http://www.libertaddigital.com/bitacora/enigmas11m/

Si queréis saber más, está lleno de información, reconozco que con el tiempo se ha hecho muy compleja la investigación, que los que participan son verdaderos expertos, pero en cualquier caso me parecen sinceros en su búsqueda, manteniendo y desvelando muchas dudas, que se deberían haber resuelto con las investigaciones policiales y judiciales, pero no fue así, la justicia en España, sólo tiene de justa el nombre, el resto da pena o miedo, según se mire.

Es verdad, que el abatimiento es comprensible viendo cuántos medios se ocupan de deslegitimar al que opina e investiga sobre el 11-m, cuánta confusión se ha creado, cómo todo aquel que toca el tema se quema, cómo se premia a los liberticidas, cómo muere la democracia, en un proceso tan lento, pero tan extendido, que no se puede sentir fácilmente ánimo.

Pero hay que seguir luchando, por ello, y apoyando a todos los que desde Libertad Digital se empeñan en sacar la verdad a la luz, defender los valores fundamentales como la libertad, la seguridad jurídica, la transparencia debida de los gobernantes, la dignidad de las víctimas, la justicia, la verdad, en fin, la democracia liberal, como debería ser en un país occidental y no es.

Cito las palabras del final del artículo de hoy de Luis del Pino "El inútil escarmiento", porque a mí me han dado ánimo, espero que también a vosotros: "Porque os despreciamos demasiado como para teneros miedo. Y porque, aunque tuviéramos miedo, tenemos algo de lo que vosotros carecéis y que a nosotros nos impide inclinar la cabeza ante vuestras miserias: ese algo se llama dignidad.
Y nosotros tenemos todo el tiempo del mundo para haceros pagar, antes o después, lo que lleváis tantos años haciéndole a este país. Vosotros tenéis prisa, y por eso habéis perdido la vergüenza. Nosotros, por el contrario, tenemos la infinita paciencia de quien sabe que lucha por algo que es justo: porque esta Nación sea alguna vez propiedad de sus ciudadanos. Y no de una casta corrompida y corruptora cuyo tiempo se acabó un 11 de marzo."

Si no hay derecha ¿qué hacemos?

Condenan a Federico Jiménez Losantos, por injurias a Gallardón(elmundo.es), que dice que el PP "no es de derechas ni de los radicales de derechas"(libertaddigital.com). El País y Público apoyan a Rajoy como candidato único, asimismo Público publica una encuesta donde dice que los votantes del PP no están deacuerdo ni con Federico Jiménez Losantos, ni con Pedro J. Ramírez.

Si alguien cree que Rajoy dirige bien el PP, será que es del PSOE, IU, ERC, PNV y demás, porque a los que votamos al PP, no. A las elecciones me remito, a las del futuro.

Si no hay derecha nacional, lo que queda es un régimen de taifas, donde los que se creen ganadores hoy en el PP, van a empezar a ver cómo se pierden elecciones en todas las comunidades autónomas donde todavía ganábamos, el mejor ejemplo es Islas Baleares, la siguiente: Comunidad Valenciana. Galicia ya se perdió, Aragón también con el PAR, creado con esta estrategia suicida de Fraga, AP y Gallardón, Navarra, ya está perdida con UPN en la vía del PAR, y sumando. El PP del país Vasco se va a desinflar, para qué votar al PP, por masoquismo, si es más fácil, más cómodo, más seguro ser del PNV, poner acento a vasco pues y ala a sobrevivir, en vez de resistir. En Cataluña, ya pasó con Piqué. Queda Logroño, Murcia, Madrid y Castilla y León.

El proyecto común no existe, la justicia es injusta, cuántos años soportará España, gobernada por esta gente. La economía va mal, sabemos que no lo saben hacer mejor, las libertades se vulneran por doquier (ni se puede estudiar en Castellano en toda España, ni se puede ser español siquiera, ni siquiera se puede ser de derechas).

Ozú mi arma. Ole que ole, Europa no se levanta ni con Lisboa ni con ná. El dicho de los gallegos es que si te los encuentras en una escalera no sabes si suben o bajan, con Rajoy he descubierto, es que no lo saben. Está bajando y no lo sabe, pierde y cree que gana, no es de derechas, ni liberal, ni de derecha extrema, no sabe lo que es, el pobre.

Nadie le dirá que está desnudo, no, ni un niño, porque el níño que lleva no es inocente, se cree listo y aspira a sucederle y le dice "que traje tan elegante llevas Rajoy es maravilloso."

Hans Christian Andersen escribió en 1837 el cuento fábula "El nuevo traje del emperador", la fábula llevaba una advertencia: "Sólo porque todo el mundo crea que algo es verdad, no significa que lo sea", o también: "No existen las preguntas estúpidas."