miércoles, 4 de febrero de 2009

Dirigiendo la crisis

Son las nueve, José (Pepe para los amigos), sale de casa, en la puerta le espera su coche oficial, hace unos minutos ha tocado el timbre uno de los guardapaldas de los que dispone (8 en turnos), buenos días Mariano, buenos días, don José.

El coche se dirige camino del ministerio, el atasco gordo, ya ha pasado, eso es para curritos, don José, es vicesecretario de la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA, en la puerta saludan uno de los 24 policías nacionales que se turnan las 24 horas del día para proteger la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA, en la puerta uno de los tres conserjes de la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA, el vicesecretario coge el ascensor y despide al conductor, uno de los dos que dan servicio al vicesecretario de la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA (en total son unos veintitantos, no es fácil de precisar, entre bajas, permisos, traslados, ya se sabe).

En la primera planta están los encargados de asuntos de personal, los de asuntos económicos, los de administración, con sus supervisores, jefes de negociado, con sus secretarias, con su bedel, hay categorías como letras y números y combinaciones infinitas hasta llegar al grado 33, y esto no es el Código Da Vinci, porque saber quién trabaja aquí y en ese caso de qué, esto si que es un misterio, con un guardia de seguridad privado, para el control del acceso de la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA.

En la segunda, está el gabinete de comunicación, con sus secretarias, con sus mensajeros, sus jefes de negociado, administrativos, hasta becarias, comparten espacio con el registro general y la atención al ciudadano de la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA, aunque al ser un negociado complicado, todavía no se atiende directamente, para eso está la dirección general de atención al ciudadano, dependiente de la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA, en otro edificio.

Al llegar a la tercera planta, el vicesecretario de la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA, está agotado, la cena de ayer, en un conocido restaurante y esos caldos fabulosos, no le sentó bien, unas siete u ocho comidas y cenas semanales son muchas para nuestro prócer con problemas de vesícula. Los representantes de las autonomías se empeñaron en pagar ellos, qué pesados en pedir más y más, la relaciones públicas del restaurante incluyó 12 comidas más, para las visitas próximas que harán el representante de la comunidad autónoma con su familia, ya se sabe, la familia es lo primero.

En la tercera planta, atestada de directores generales, con su personal, guardaespaldas, subdirectores, directores, jefes, personal auxiliar, administrativos, secretarias, un continuo ir y venir a la cafetería, carpetas amarillas, que se acumulan en las mesas, problemillas de la gente, ya se sabe. ¡No me pases llamadas, Guadalupe!, si, don José.

Pepe, al fin solo, en su despacho, empieza a leer el dossier que le ha elaborado su departamento de prensa, bueno, en realidad, lo hace una empresa privada, que se lo envía al departamento de comunicación, que a su vez se lo entrega a la secretaria, que lo coloca sobre la mesa del jefe.

¡Qué hijos de puta estos periodistas, siempre entrometiéndose en todo!, acaba de leer el titular donde se desvela que su hermano, cobra 24.000 euros por hacer informes sobre la repercusión de la vida urbana en el estornino burgalés, entre otra docena de informes de títulos semejantes. Asimismo, han sacado que su mujer, tiene propiedades por 10 millones de euros, tras haber estado 6 años en paro, y un trabajo en la empresa de informes del hermano de vicesecretario de la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA.

Ring, rinnng, Don José, siento molestarle, es el secretrario de la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA, -¿Pepe? -Luisito, ¿qué tal? -Ya he visto lo cabrones que son estos periodistas, no te preocupes, he hablado con el ministro y me ha dicho que te respalda al cien por cien -Más le vale a ese cabrón -No te cabrees que esto pasa en dos días. -Bueno, quedamos en vernos esta noche. -Claro, y estate tranquilo.

Don José, estaba cabreado y con razón, cómo han conseguido esos cabrones todos esos datos, eso es una jugada del vicesecretario de la vicesecretaría del viceministerio segundo del GOBIERNO DE ESPAÑA, un guerrista, que estuvo en su puesto y que todavía quería que le encargásemos los informes a la empresa de su hermano, no te jode.

¡Tengo unas ganas de volver a mi autonomía, donde todo es mucho más respetuoso y no tienes a tanto cabrón de periodista vigilándote! Se va a cagar ese predicador de la radio con la denuncia por lo penal que le voy a poner por vulnerar mi derecho al honor por llamarme presunto choricete, ¡Guadalupe!, ponme con el departamento jurídico de la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA, que se va encargar de preparar la demanda.

Don José, tiene una rueda de prensa a las doce y después la presentación del libro de Maria Antonia, ya sabe que tiene que hablar de lo sospechoso que es la trama de espías de la oposición, que los ciudadanos no se merecen ese trato, no responda a ninguna pregunta de empleo, y ponga cara de indignación si se la hacen, que hemos recibido instrucciones de arriba. Gracias, Guadalupe, no sé qué haría sin ti.

Tras la comida, en el conocido restaurante de nueva cocina, volvió al despacho a echar una cabezada, por la tarde no queda nadie y se está más tranquilo, luego, reunión con el secretario de la vicesecretaría del viceministerio del GOBIERNO DE ESPAÑA, donde tendrán que concretar el presupuesto para los próximos meses, y cena, joder, ¡qué cansado!.

PD: 3 millones de funcionarios hay en España, además de todos los demás servicios contratados, sin ir más lejos, el presidente del Gobierno tiene entorno a 600 asesores personales, que esperan a que el presidente encuentre un minuto para ellos, no sé cómo puede alguien necesitar 600 asesores, lo peor es encontrar un momento para quedar con ellos, saber de qué son asesores, acordarte de lo que querías que te asesorasen, asimismo, con tanto asesor, es de suponer que el presidente no sabe nada de nada, tampoco le hace falta, aunque claro, habrá distintas asesorías que no concuerden, y a la vez que no concuerden con los asesores de los ministros, de los directores generales, de los presidentes de las autonomías, de los consejeros (por cierto, ¿consejero tenía algo que ver con asesor? ¿alguien conoce a alguno de esos asesores? ¿tienen despacho, secretaria, personal a su cargo? ¿quién lo paga?.

De todo esto, solo puedo responder a la última pregunta, si tú y yo, todos los ciudadanos con nuestros impuestos (el tabaco, el IVA, el aparcamiento, el IRPF, el IAE, la contribución, la Seguridad Social, multas, tasas, formularios, al consumo, por servicios, etc,....) y la única manera de controlarles es mediante los medios de comunicación que destapen corrupción, delitos e injusticias, por eso quieren controlar a los medios (más de los que ya controlan), y nosotros con nuestra opinión directa en vivo o en Internet o con nuestro voto. Así que todos tenemos la responsabilidad de lo que pasa, reitero: ¡despertad, malditos!

Un día normal: ¡emergencia nacional!

Doce de la mañana, uno de los de Recursos Humanos se te acerca, por favor me puedes acompañar, claro, claro, entramos en esta sala, siéntate por favor, mira, sabes que las cosas están mal, claro, claro, siento comunicarte que vamos a prescindir de ti, mientras saca los papeles del despido, entra un asesor, empiezas a sentir que la sangre sube a tu cabeza, no puedes hablar, miras un poco desconfiado los papeles pero si, parece que están bien, no te preocupes porque te arreglamos el paro, como llevas tiempo trabajando tienes año y medio, vale, vale.

Comienzas a recoger tus cosas, ya han cambiado tus claves en el ordenador, una persona supervisa todos tus movimientos, también lo que te llevas, los compañeros no quieren mirar, ahora eres un apestado, los más amigos se acercarán en el último momento, para susurrarte qué hijosdeputa, ya quedaremos, mientras vas saliendo del lugar donde has pasado tus últimos años, vas pensando cómo decirlo en casa, cómo vas a pagar el coche, la hipoteca, los gastos fijos,...

Mañana, irá tras tus mismos pasos, el de Recursos Humanos, el que agachaba la cabeza, el que se sintió aliviado, y después, la cola del paro, ¿qué has estudiado? ¿quieres hacer algún curso?, te faltan papeles, vente mañana, en casa, todos contigo, no te preocupes, ¿pero cómo no me voy a preocupar?

Esta historia, se ha repetido este año más de un millón de veces, es evidente que el Gobierno, encabezado por Zapatero y Solbes mintieron, mienten y mentirán, es evidente que tampoco saben hacerlo mejor, ya han sacado a los perros (véase Sebastián, cuando no dice tonterías, suelta bravuconadas: os vigilamos banqueros, cuidadín), los de siempre están neutralizados (los artistas con los Goya y Gaza, haciendo el G..........), los sindicatos de los trabajadores pensando que no va con ellos el paro, al final, no son trabajadores ¿no?, y la oposición con Rajoy diciendo que no va a criticar al Gobierno.

Mientras, el Gobierno nos está metiendo en una deuda pública que nos va a dejar como Argentina con inflación bestial diaria, con un 25% de paro, pensando en el corralito y ganando elecciones, como la familia Kirchner, con corrupción hasta la médula y sin oposición, desactivada o autodesactivada.

Este panorama, parece desolador, pero como nadie diga nada, así seguiremos y llegaremos a eso, ¿estáis ahí? ¿queda algún español o española con cabeza? ¿los homosexuales casados también van al paro o tendrán todos trabajo en televisión? ¿ser naciionalista da para comer a todos o no? ¿es mejor ser socialista o nacionalista para pagar la hipoteca? ¿los buenrrollistas tienen todos buenos ahorros? ¿qué pasa Rajoy, esperas heredar los restos de España? ¿los del PP éramos 10 millones o mejor cada uno a lo suyo? ¿la primitiva toca? ¿a todos?

Estamos en emergencia nacional, esto se hunde, alguien quiere salvarlo, pero claro, como es un término discutido y discutible, y en realidad, no sabemos si es estanflación, crisis o qué, y la culpa es de los bancos y de los del ladrillo, pues nada, a esperar a que escampe: ¡despertad, malditos!