El mayor problema que percibo en la España actual es la inseguridad jurídica, concretamente la desigualdad ante la ley que se percibe desde el ciudadano normal ante el poderoso, venga de donde venga, siendo el poder político el mayor causante de esta desigualdad invalidando del todo la supuesta democracia que nos ampara a los ciudadanos.
Impunidad de los piquetes respecto a la coerción, agresión o daño contra personas o propiedades por el simple hecho de querer ejercer su derecho a trabajar o circular por cualquier carretera o polígono de España. Ante la dejación de funciones de la policía y de sus mandos, policiales o políticos, desde las delegaciones del gobierno (de España). La muerte trágica de este camionero se hubiera evitado sino le hubieran inculcado que puede y debe coaccionar a sus compañeros y a cualquiera en general para hacer la huelga, un derecho, de hacerla y de no hacerla. Impunidad de los albertos, al tener buenos padrinos. Impunidad de los que llevaron a cabo el 11-m.
La gente no debe percibir la diferencia esencial que existe en estos casos con otros, la ley no sólo vale cuando es entre iguales sino cuando es entre diferentes, en el caso de los piquetes, se está haciendo dejación porque no se quiere asumir la realidad del problema que es la subcontración, desde las empresas grandes a los pequeños que se manifiestan y están en huelga, con mucha razón, pero ello no les autoriza a utilizar la violencia ni con compañeros, ni con cualquiera otro que quiera trabajar. El gobierno gobierna ayudando a las grandes empresas, que es muy posible que tengan beneficios debido a las bajas tarifas que pagan a los autónomos del camión, como vemos que ocurre en otros sectores las normas no funcionan igual para todos.
En el caso de los albertos, su relación con el poder hace posible sentencias que parecerían imposibles en cualquier otro caso. Aparte de eso, cómo podría ser en España lo de demandar a una gran empresa, por parte de un particular y ganar.
Y en el 11-m, qué decir, si se ataca e insulta a cualquiera que duda de las versiones oficiales aunque no sean coherentes, y en este caso el poder está claro que tiene interés sino no habría sido y siga siendo tema de debate, guerra mediática e incluso de querellas entre políticos y perioodistas, o incluso de depuraciones al estilo mafioso en muchos ámbitos políticos, jurídicos, policiales.
La impunidad produce inseguridad jurídica, injusticia, injusticias, escarnio a las víctimas, miedo, terror. Eso es la España actual, y podíamos seguir con la impunidad de jueces incompetentes como en el caso de la niña de Huelva, Mari Luz Cortés y tantos otros, que no sabemos.
Impunidad y falta de confianza, de incertidumbre de la sociedad que percibe la crisis, que la sufre en su economía, falta de confianza en los poderes públicos, en la oposición, en la posibilidad real que estos incapaces puedan hacer algo. Ese es el éxito de esta huelga, que la gente apoya, entre resignada y cabreada, ante el desestimiento de la sociedad, perversión del poder sean sorayas, rajoyes, zapateros o malenis, da igual, pueden abusar del poder, hacer dejación de él , que no va a pasar nada. La democracia ha muerto, ayer el Parlamento votó unido porque todos están en el mismo barco, uno distinto del de la sociedad.
