jueves, 28 de noviembre de 2013

Democracia de delincuentes

Al ver el título anterior (Democracia de impostores), he pensado que ya tenía título para hoy, pero por no repetirme, he hecho una variación. Realmente, cada vez estoy más indignado, voy a coger mi perro, mi flauta, una tienda de campaña y a la Puerta del Sol hasta las campanadas, no soporto más este año 2013.

Al ver salir a los asesinos etarras, a los violadores asesinos, a los violadores en serie, la sensación que tengo es que todo nuestro sistema penal se sostenía en la Doctrina Parot, y no en el Código Penal como en los países serios.

Resulta que sigue habiendo reducción de penas, así que matas a 50, te condenan a 1.500 años, te apuntas a la lavandería de la cárcel y estudias Derecho en la UPV y cumples 12. Y todavía sigue siendo así. Lo de la Doctrina Parot estaba cantado que la iban a tumbar, pero no han legislado nada, qué fue de aquello de los 40 años y la no reducción de penas para terroristas, ¿Existe o lo soñé? ¿O fue un engaño para aplacar la ira popular de ese momento?.

Y pienso que la resistencia de los legisladores y ejecutivos, diputados y senadores de España desde que existe esta “democracia” a endurecer el Código Penal está en que tienen mentalidad de delincuentes.

Sin duda, más de uno y de dos y de tres lo son, están condenados, y para que condenen a un político en activo en España hay que haberla hecho gorda y burdamente, y me voy a ahorrar los muchos ejemplos, simplemente el GAL, el secuestro de Segundo Marey, que fue más o menos así: van a secuestrar a un dirigente de la ETA y se confunden con un señor normal que pasaba por ahí que se parecía, pues así. Por supuesto, el Señor X recibió un indulto o no, y está libre por la doctrina Garzón o Pierrot o Tabú o Nohayhuevos.

A lo que iba, el haber estado y seguir estando dirigido por unos representantes (todos) con mentalidad de delincuentes es un problema. Y el problema es cómo conseguir partidos políticos con gente honrada, espero que los que formen parte de Ciudadans en el resto de España y de UPyD lo sean y el próximo parlamento haya mayoría de gente decente que legisle como tal y no como delincuentes como hasta ahora.

Y por último, cuando veo las polémicas por la elección de los dirigentes del poder judicial, cuando veo ese reparto, ese acuerdo entre los "grandes partidos", ese acuerdo entre las fuerzas "democráticas" españolas y nacionalistas, sospecho más aun de ellos, hay miedo, se huele, y por eso, tratan de asegurar que no haya quién les condene.

Así no hay manera de regenerar una democracia, pero con Gallardón de ministro de Justicia, es misión imposible.