miércoles, 30 de noviembre de 2011

¿De caballero a experto en conocimiento?

Cuando leo noticias como estas:
“La agencia de calificación Moody's ha dado un toque de atención a 87 bancos de 15 países europeos, entre ellos, 21 entidades españolas y 17 italianas.”
“La actualización de los criterios de calificación llega después de meses de duras críticas contra las agencias de medición como S&P, Moody's y Fitch, por no alertar a tiempo sobre los riesgos que desembocaron en la crisis financiera de 2008.”
Me ha surgido una duda: ¿Quién y qué son estas agencias? La realidad es que no sé nada de ellas, aunque estemos cansados de oírlas nombrar. En realidad voy a responder a las cinco W y una H (Who? ¿Quién?; What? ¿Qué?; Where? ¿Dónde?; When? ¿Cuándo?; Why? ¿Por qué?; How? ¿Cómo?).

Primer paso ¿Qué?: Wikipedia: Las agencias de calificación de riesgos, agencias de clasificación de créditos o agencias de rating son empresas que, por cuenta de un cliente, califican unos determinados productos financieros o activos ya sean de empresas, estados o gobiernos regionales (estados federados, comunidades autónomas). Bien.

Segundo paso ¿Cómo?: Wikipedia: Publican unos datos que informan, por ejemplo, de si una inversión en un determinado producto financiero (letras del tesoro, bonos, acciones, etc.) es arriesgada, analizando la posibilidad de que el inversor cobre los intereses y de que recupere el dinero una vez vencido el producto. Utilizan modelos econométricos en los que usan distintas variables como la deuda acumulada, la velocidad en devolverla, etc.

Tercer paso ¿Por qué?: Wikipedia: Los inversores, emisores, bancos de inversión, intermediarios y gobiernos son los que usan las valoraciones del riesgo de créditos. Para los inversores, las agencias de calificación de riesgos aumentan el abanico de alternativas de inversión y proporcionan medidas de riesgo relativo fáciles de usar. En general esto incrementa la eficiencia del mercado, al reducir los costes tanto para el que presta como el que toma prestado. Se basan en dos aspectos inversamente proporcionales: riesgo y rentabilidad. De manera que a igualdad de rendimiento, elegiremos la inversión de menor riesgo, y a igualdad de riesgo elegiremos la inversión con mayor rentabilidad.

Cuarto paso: ¿Quién? ¿Dónde? Y ¿Cuándo?: Wikipedia: Las principales agencias de calificación crediticia son las siguientes: Standard & Poor's - Estados Unidos, Moody's - Moody's Investors Service - Estados Unidos y Fitch - Fitch Ratings - Estados Unidos - Reino Unido. Estas tres nacen en Nueva York a principios del siglo XX.

Y aquí empieza el asunto:
Fitch fue fundada por John Knowles Fitch el 24 de diciembre de 1913 en Nueva York como The Fitch Publishing Company, Inc. Tras haber vendido un negocio anterior de flores y trabajar en la imprenta de su padre, de la que se hizo cargo a su muerte. Las empresas de Fitch se dedicaban a hacer publicaciones sobre los valores bursátiles de la Bolsa de Nueva York.

Moody's fue fundada en 1909 por John Moody, después de haber quebrado en el crac de la bolsa de 1907 no haciendo frente a sus deudas, según nos cuentan en Wikipedia. Los Manuales de Moody todavía son publicados, continuando la tradición comenzada por el Manual de Moody sobre empresas ferroviarias y sus bonos de bolsa (Moody's Manual of Railroads and Corporation Securities).

Standard & Poor´s. La empresa comienza su historia a 1860, con la publicación por Henry Varnum Poor de la Historia de Ferrocarriles y Canales de los Estados Unidos. Este libro era una tentativa de compilar la información sobre el estado financiero y operacional de empresas de ferrocarril estadounidenses. Henry Varnum continuó estableciendo la H.V. and H.W. Poor Co con su hijo, Henry William, publicando cada año las versiones puestas al día de este libro.
En 1906, Luther Lee Blake fundó la Standard Statistics Bureau (oficina de estadísticas estándar), para suministrar información financiera sobre empresas que no fueran del sector del ferrocarril.
En 1941, Poor and Standard Statistics se unen convirtiéndose en Standard & Poor's Corp. En 1966, la empresa fue adquirida por The McGraw-Hill Companies y ahora es su división de servicios financieros.

En 1909, James H. McGraw, que había fundado en 1888 el American Journal of Railway Appliances y después se convierte en McGraw Publishing Company en 1899 decide unirse con John A. Hill, editor de publicaciones técnicas y comerciales que tenía desde 1902, la Hill Publishing Company, por y para compartir intereses en la industria editorial, formando The McGraw-Hill Book Company.

Como vemos, todas estas personas fundaron sus empresas basadas en transmitir conocimiento, varias trataban sobre los valores relacionados con las compañías de ferrocarriles, otras de publicar datos y estadísticas generales de la bolsa de Nueva York, y todas nacen del sector editorial, especializándose en temas empresariales.

Llegados a este punto: dos aspectos me llaman la atención: la presencia del ferrocarril en el origen de esta publicación de datos financieros y la Bolsa de Nueva York y su papel en la financiación de dichas empresas.
Me llaman la atención porque acabo de leer un capítulo firmado por Peter Drucker titulado “Más allá de la Revolución de la Información” en Organización empresarial (Deusto, 2007) donde comienza con una historia del ferrocarril como factor importante en la Revolución Industrial. Y de ahí pasa al momento actual que vivimos de crisis, con la globalización, la revolución tecnológica y de la información que harán surgir nuevas formas de vida y nuevas oportunidades y sectores.

Drucker dice que en el siglo XIX, Inglaterra se quedó atrás por no tratar a los tecnólogos como a los caballeros, como sí ocurrió en Estados Unidos, ahora es el profesional del conocimiento, ese nuevo emprendedor al que hay que apoyar, pero cómo distinguir y saber qué son y qué hacen esos profesionales de los impostores, eso lo dejo para otro día.

La importancia de estas agencias de ratings estriba en su gestión del conocimiento, quizá el futuro pase por lugares cercanos a éstas, aunque han tenido fallos garrafales como el de Enron o como el de Lehman Brothers, sigue siendo importante su opinión y valoración, vital si vemos las noticias de deudas soberanas de Grecia, Portugal, Italia, España, Francia, Alemania,...

Estos fallos son debidos a que lo que ellos comercializan es información, no están auditando nada, solo opinando, por lo que pueden fallar, muchas veces por el conflicto de intereses al que se enfrentan, donde quien paga es el emisor de deuda, el evaluado, como ocurre con el resto del periodismo, donde quien paga es el noticiable (grandes empresas, estados, comunidades autónomas) no el receptor de noticias, que las recibe gratis o subvencionadas. Pero en el nuevo conocimiento, la información circula libremente, lo difícil es saber quién nos da confianza, de quién nos fiamos.

martes, 29 de noviembre de 2011

De libros

Acabo de terminar la novela de Luis Herrero, El tercer disparo (La esfera de los libros, 2009), me ha gustado, una novela que se ambienta en la política española reciente, y que trata el terrorismo, los espías y el periodismo. Como novela es interesante y dado el conocimiento que tiene el autor del ambiente en el que se desarrolla es bastante didáctica, pesimista con la naturaleza humana, pero aún así, como todo buen autor de novela negra, salva al lector de la tristeza con una coral de héroes anónimos que son testigos y protagonistas de esta historia.

Y como esta obra, también ambientada en esta España de la transición a nuestros días, con etarras, políticos, espías, policías y guardias civiles, he leído este verano una buena novela policiaca Las lágrimas de Gorka (Ediciones Atlantis, 2011) de Javier Reyes Izquierdo (http://www.edicionesatlantis.com/). Donde el autor, hijo, nieto, bisnieto y tataranieto de la Benemerita, que entró en la Guardia Civil a los 18 años y que un servicio con explosivos le apartó del servicio siendo todavía muy joven, narra una historia muy interesante, que se lee muy bien, y que además juega con muchos aspectos biográficos del autor, unos vividos, otros oídos de primera mano que hacen que lo ficticio, tenga mucha verdad, como la buena literatura.

Y de verdades a medias, un ejemplo, el libro de Manuel Fernández Monzón, Una vida revuelta (Ediciones Península, 2011), donde el general retirado narra sus experiencias en la política, en el espionaje y en la milicia. Cuenta algunas cosas interesantes, que no por sabidas estaban dichas tan explícitamente como que los servicios secretos españoles cobraron parte de su sueldo, durante bastante tiempo de los norteamericanos, habla de Jano, ese archivo donde todo español que vaya a ser algo o lo haya sido está incluido (obra, milagros y vicios), que también cita Luis Herrero. Es interesante la parte de los contactos, creación y promoción de los partidos políticos en la etapa final del Franquismo. Y es algo novedoso en su narración sobre el 23-F. También ha tenido su polémica por declararse republicano, ya que aunque matiza, suena un poco raro en un general de esa época, ligado a la transición y a la monarquía, que últimamente, no hace si no recibir palos.

Por cierto, de Luis Herrero, me leí el libro sobre Suárez, Los que lo llamábamos Adolfo (La esfera de los libros, 2007) y también tiene aspectos interesantes, como la muerte de su padre Fernando Herrero Tejedor, que fue ministro y secretario general del Movimiento Nacional en el penúltimo gobierno de Franco, de su experiencia como periodista y lo del Almendro en el 23-F.

Y hablando del 23-F, me he leído Anatomía de un instante (Mondadori, 2009) de Javier Cercas, que resulta muy interesante aunque no comparto la visión del autor, me gusta el formato, que se parece a su otra obra de éxito Soldados de Salamina (2001), y el libro de Jesús Palacios, El 23-F, el Rey y su secreto (LD Libros, 2010), con el que estoy mucho más de acuerdo y me creo más.

El tema del poder, la naturaleza humana, ambientada en la España de la pre-transición, de la transición y de lo post-transición está en auge, este tema en Estados Unidos, traería bastantes títulos de cine, con posible éxito, pero en España, hasta los escritores se la juegan un poco, los cejitorcidos del cine y vientre sueltos del cazo, ni se lo plantean, y los poderosos no se lo pueden permitir, porque aquí todo está relacionado y el que no lo está, tiene crisis, y la vida sin dinero y sin poder es muy dura.

Únicamente encontramos alguna película como El Lobo (2004) basada en la vida de Mikel Lejarza, que fue producida por Melchor Miralles y otros cuando estaba en El Mundo, y que he leído en Las alcantarillas del poder (La esfera de los libros, 2011) de Fernando Rueda, que finalmente le condecoraron por ayudar a desarticular la cúpula de ETA, algo es algo 20 o 30 años más tarde, como todo en España, llega tarde, cuando llega, la mayoría de las veces, lo que llega es la ingratitud, la tristeza y el hastío de los buenos. Casi nunca la venganza, solo en las novelas. De justicia, ni hablamos.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Diccionario de la Crisis

Después de muchos años leyendo, he decidido devolver a España lo que he pagado con mi dinero, no, todavía mis libros no han llegado a la cuesta de Moyano, sigo vivo, pero antes de eso, voy a explicar qué es la crisis en España.

Y como podemos obviar el problema de España y los datos generales de España, vamos al tema, podríamos hacer un tesauro con las palabras clave, por ejemplo, envidia, no confundir con endivia, que es de la misma familia que la achicoria, expresión de la abuela, como sustitutivo del café en la guerra y posguerra, pero como tampoco quiero meterme en harina, y no soy de Ibi, a otra cosa.

Dada mi incapacidad para hacer una guía, me ha salido un diccionario, y con el sonido de voz y acento de Eugenio, con la a, autonomía, no, esto no va a ser el tema. Con la a, autónomo, no, esto menos. Con la a, de ajo y con la a, de agua.

Con la b, de botellón: costumbre local prohibida por las autoridades de algunos pueblos y ciudades de España, pero según se puede observar crece más en función de lo supuestamente prohibido que está. A los chicos y chicas, les gusta el bajo precio, la charla, los amigos, la movilidad, la libertad,...A los vecinos, a los padres de esos chicos o de otros que están en otra zona, les molesta el ruido, la suciedad del momento y del día después, a los bares, la pérdida de clientes, a los chinos, les gusta por la adquisición de clientes, a los de las ambulancias también por tener siempre clientes nuevos, pero dejemos este tema que puede ser espinoso.

Con la c, de crisis: cambio en griego, momento chungo, resumiendo, es cuando empiezan las cosas a ir mal, luego peor, pero lo siguiente es mucho peor, y lo mejor es que nadie parece saber mucho del tema. Así desde la quiebra de un banco americano, pasando por la proliferación del vocablo sub prime, luego de otro que nadie sabe lo que es, como un test de stress de los bancos, a las cajas que dejan de serlo y se convierten en pozos, a los colchones que dejan de serlo, y al final, un paso más, a las tiendas de oro. ¿Y a mí, quién me mira el estrés?

Con la e, de educación, si alguien sabe por qué protestan los profesores que me lo diga, porque en la situación de ellos no me vería tan mal, pero yo no soy de ningún sindicato, ni tengo convenio, ni nada. Bueno, la educación es para los alumnos, los profesores se supone que ya están educados, o no. ¿Y los alumnos?, 30% de abandono escolar en primaria, mal dato, 40% de abandono en secundaria, malo, fp y carreras poco adaptadas al mercado laboral, ¿también hay abandonos similares?, chungo, no pasa nada, eso es educación de calidad.

Con la f, de financiación: ¿Cómo?, que no, que el departamento de riesgos ha dicho que no, pues nada, no pasa nada. Que si quiero un crédito para una empresa debo tener una nómina de funcionario, pero que de autónomo no vale ninguna garantía, bien voy a opositar a empresario del estado, llamaré al instituto Nóos, para ver cómo lo hago.

Con la g, de ganar: La banca gana, hagan sus apuestas.De garantía, hemos dicho que no, y no es no.

Con la h, de hucha: El cerdito está roto, hasta aquí hemos llegado. Hala Madrid.

Con la i, de interés: Interés variable, interés fijo. No, hemos dicho que no nos interesas, gracias.

Con la j, de justicia: ¿Justicia en España? Vamos, que es mejor jugar a la lotería que tienes más posibilidades. Jugar a la primitiva, a los ciegos, a la lotería nacional. Bien, por lo menos queda algo nacional.

Con la K: no, no se escribe con k lo que estás pensando, kiosco sí, encuentra una buena noticia y conseguirás participar en el sorteo de una cubertería completa, siempre que hayas hecho el carnet con 30 cupones.

Con la l, de lentitud: los meses pasan rápido pero los cobros son lentos, muy lentos, excesivamente lentos. Las ventas no levantan, las letras logran llevarte al lodo, te lanzan al lugar donde puedes contar las nubes que pasan.

Con la ll, de lluvia: allí donde cae el agua, donde están los fumadores, no, no es una terraza que estamos en invierno.

Con la m, de miércoles: Los lunes, los martes, los miércoles al sol, cuando sale, los demás días, métete en casa.

Con la n, de no: Que te hemos dicho que no podemos contar contigo, que no, que el departamento de riesgos dijo que no.

Con la ñ, de no: Te lo digo desde la Blackberry que no.

Con la o, de oposición: o esto o lo otro, y si no quieres, lentejas. Remitirse a la a, de ajo o a la a, de agua. O quizá a la ll, de lluvia.

Con la p, de pesado: Que no hay préstamo, que no. No me mandes más veces el CV que no tengo trabajo, lo siento.

Con la r, de riesgo: riesgo país, que qué quiere decir, según comentan es el diferencial respecto a Alemania, si España está en 500 puntos y paga el 6,6% de interés y a tí te cobran el 12 o más, podemos darnos cuenta de que nuestro diferencial de riesgo personal está más allá del rescate. Pero a mí, ¿quién me rescata?, si la respuesta es nadie, date por jodido. Pregunta al instituto Nóos, para enterarte del tema.

Con la s, de salud: Eso es lo importante, la salud, pero la sanidad, ya volvemos a tener un problema y un asunto espinoso. Salas de espera o sociedades médicas, si no hay dinero, sacabó. Suerte. Y relativas a crisis específicamente: Solbes, Salgado, Socialismo,...

Con la t, de tesoro: En España tenemos el tesoro público, que no es exactamente como el tesoro de los piratas, no, aquí te vas a encontrar con todas y cada una de las deudas adquiridas con el diferencial chungo que hablábamos antes.

Con la u, de ubre: Tantos hubo chupando, que ya no cubre, así que se queda en...t de tieso, así está el estado.

Con la v, de visitantes: No será Diana, no, es Ángela. España va bien, vamos tirando, venga no es para tanto, visto lo visto, vota. De ventas, también, que más cornás da el hambre.

Con la x, marca en la casilla de parado, con la x: xilófono, xenófobo, xerigrafía y poco más.

Con la y: que ya no es griega si no ye, de yeti, de yirona, de jedi, que la fuerza te acompañe.

Y con la z, de zapatero: Podríamos hablar del hijo de Gepeto, al que le crecía la nariz, pero no, vamos a hacer memoria histórica y recordar al nieto del Capitán, sí, de ése. Zopenco, y otras palabras más por esta zona.

Zozobra, crisis, agonía, eso se pasa y ánimo, que hay muchas más palabras: empeño, trabajo, esfuerzo, lucha, esperanza, solución, arreglo, amigos, alegría, felicidad, amor, familia, recuperación,...elecciones.

lunes, 14 de noviembre de 2011

Las dos Españas

La España profunda vive escondida del sol en cuevas, en altos picos solitarios, en cambio, la España oscura vive el resentimiento interior, la envidia y la frustración.

La España profunda disfruta de sus paisajes, de sus tradiciones, de sus paisanos. La oscura quiere cerrarse al exterior, odia al extranjero, se cree sagrada, pero es paleta.

La España profunda es de gente callada que podía dar lecciones. La oscura es de propagandistas que no saben nada.

La España profunda es de trabajadores orgullosos de su trabajo, la oscura está llena de impostores.

La España profunda ha conservado los bosques, las iglesias y los castillos. Mientras la España oscura pone alambradas en el campo, hace fuegos sin conocimiento, construye urbanizaciones en plena naturaleza.

La España profunda acoge, ayuda, es buena gente. La oscura está llena de trepas, de totalitarios, de ladrones y mangantes con pinta de ejecutivos.

La España profunda habla con corrección y educación, respeta y admira. La oscura presume de su ignorancia en distintos idiomas, de sus cargos mientras sueña que pierde el pie y siente miedo.

La España profunda tiene ideas y tolera las de los demás. La España oscura odia, quiere imponer sus criterios sin más.

La España profunda cuando va a la guerra está en el frente. La España oscura es de checa y retaguardia, de inquisición y denuncia falsa.

La España profunda olvida rápidamente y sueña con un futuro mejor. La oscura recuerda los desagravios y olvida lo recibido.

La España profunda lee, reza, sale al mar, labra la tierra, lleva el ganado, crea trabajo, lucha por la vida. La oscura se aprovecha y echa a perder cuanto toca, se parasita en donde puede, maldice, malmete, mal anda.

La España profunda triunfa. La oscura malgasta, se ufana de lo conseguido por otros y se cree más lista, cuando sabe que miente.

La España profunda apaga los fuegos, limpia las tumbas. La oscura prefiere crearlos y llenarlas con gente nueva, llenarlas de niños, de mujeres y de hombres.

La España profunda muere en silencio con honor. La oscura grita con pavor.

La España profunda muere. La España oscura crece y mata en la intimidad, otras sale a la luz de los medios como en Puerto Hurraco y tantos y tantos sitios.

La España profunda perdona. La oscura anida el rencor y cuando puede vuelve con su mal.

A veces se confunden, unas y otras, pero no son la misma, somos nosotros quienes las confundimos, a veces, esa España oscura logra confundirnos. Otras la profunda nos llena de ánimo, de aliento, de esperanzas.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Suspiros de España

Leo en http://www.perezreverte.com, una entrevista que le hace la gente a Arturo Pérez Reverte:
"PREGUNTA
¿Cuál es el motivo para permanecer en España y no exiliarse por motivos socio-culturales a alguna otra nación en la que sí se use el sentido común?
Respuesta:
Porque a pesar de todo, cuando decidimos ser espléndidos, generosos o divertidos, nos salimos del mapa. Entonces me gusta estar aquí y verlo. Supongo que amo a España precisamente por lo que pudo ser y no es. Y también por lo que muchos siglos de fanatismo e incultura la han obligado a ser. Como uno de esos amantes de los antiguos folletines sentimentales, la quiero por huérfana y por desgraciada."

Ese amor a España es lo que más me gusta de Pérez Reverte, y yo que también la siento, no cómo cuando era pequeño o adolescente que entonces era orgullo, hoy en día es desaliento, es pena y desesperanza, porque siempre hemos podido ser grandes, pero cada dos por tres acabamos jodidos.

Jodidos por todos los mangantes que se hacen con las riendas, o peor, que aupamos nosotros a esas riendas, por la apatía con que nos dejamos empantanar, por el mal pago que hacemos a los que sirven a España, con la envidia con que acogemos a los mejores, que si nos les despedazamos, los hacemos morir de tristeza, o irse, al exilio interior o exterior, acabándose en el silencio.

Esta España, que cuando saca el diente tiene gracia, que cuando lucha tiene capacidad de sufrimiento y sacrificio, me gusta, me gusta cuando calla y aprieta los dientes, cuando es valiente y como nación da lecciones al mundo, pero luego se olvida de todo y se convierte en una España individualista y alcohólica, desgraciada y sin esperanza, fanática o tonta, llena de demagogos y caraduras, llena de cobardes y traicioneros, llena de trepas y ladrones, o de arpías o de chupaculos, vendidos y serviles,...

Por eso me gusta lo que escribe Pérez Reverte, cuando saca a personajes con honor, valientes, de esos soldados y capitanes, que pese a todo, luchan como fieras, que en un momento dado, nos hacen a todos sentirnos orgullosos de ser lo que somos, porque pese a todo, sirven a España, mueren por España, y viven como hombres o como mujeres de honor, sin dejar de tener debilidades y bajezas, siempre hay un instante que hace que valga la pena ser español.

Yo quise ser un héroe, nunca lo he sido, y como Dante, encontrándome "Nel mezzo del cammin di nostra vita mi ritrovai per una selva scura che la diritta via era smarrita", me encuentro en la selva oscura, la vía recta la he perdido, no sé si la he llevado nunca, siento que he perdido el ideal de esa España y simplemente lucho por sobrevivir sin esperar más gloria que algunos buenos momentos, ver crecer a mi hija, vivir feliz dentro de lo que se pueda en familia y sabiendo que el éxito no es más que una quimera, y recogiendo citas varias: "Son españoles... los que no pueden ser otra cosa", y acabando con Pérez Reverte, unas citas sacadas de wikipedia:
" Esa tragedia de ser español, esa amargura, está reflejada en los libros de Alatriste. Cuando uno tiene memoria histórica de la de verdad, comprende que ser español no es fácil "

«— No queda sino batirnos.

— ¿Batirnos contra quién, don Francisco?

— Contra la estupidez, la maldad, la superstición, la envidia y la ignorancia [...] Que es como decir contra España, y contra todo».
(Conversación entre don Francisco de Quevedo y el capitán Alatriste).