lunes, 8 de septiembre de 2008

Piedras claves en política española III

Entonces, ¿cómo fue la Transición?

Durante la crisis económica de 1975-1980, los conservadores, liberales, socialdemócratas, los democristianos y progresistas conformaban en gran medida la UCD, con un gran ejercicio de posibilismo consiguieron hacer la Transición española, en su camino, contaron con cierta colaboración de la Jerarquía eclesiástica, los ultraconservadores, comunistas y socialistas, y en menor medida de conservadores nacionalistas.

En contra, ultraizquierdistas nacionalistas con sus grupos terroristas Terra Lliure y ETA, comunistas como el GRAPO y parte de la ultraderecha (que alternaban su adhesión a las fuerzas armadas, con acciones violentas y acción política democrática con partidos políticos).

Aunque había siglas políticas casi para cada ciudadano, las siglas que salieron de las elecciones de 1977 dejaban un panorama básico, con UCD que ganaba con mayoría (6.310.000 votos), PSOE (5.371.000 votos), socialistas y progresistas como segundo partido, PCE (1.710.000 votos), los comunistas en tercer lugar, AP (1.505.000 votos), en cuarto lugar, luego varios partidos que se integrarían más tarde en otros como PSP (816.000 votos) de Tierno Galván o EE (Euskadiko Eskerra) (61.000 votos) en el PSOE, PDPC (514.000 votos) y UDC-DCC (173.000), los que serían después CIU, el PNV (296.000 votos) y ESQUERRA (144.000 votos), que se mantendrían prácticamente igual y el CAIC (37.000 votos), que sería luego el PAR aragonés.

En 1979, serían parecidos los resultados, UCD (6.268.000 votos), PSOE (5.470.000 votos), PCE (1.938.000), CIU (483.000 votos), PNV (296.000 votos) aunque aparecen partidos de ultraderecha (Unión Nacional-Fuerza Nueva con 379.000 votos) o ultraizquierdistas nacionalistas catalanes ERC (123.000 votos) o vascos pro terroristas como HB (172.000 votos). Andalucistas socialistas (325.000 votos), canarios (59.000 votos) y aragonesistas (38.000 votos). Lo más significativo es la pérdida de peso de AP (1.088.000 votos), que se presenta como Coalición Democrática (CD), porque se les van a Unión Nacional-Fuerza Nueva, claramente.

En 1981, superada la crisis económica más o menos, y llevada a cabo la transición política e institucional, la UCD, que casi actuaba como partido único o de consenso empezó a tener problemas de cohesión, la dimisión de Suárez y el golpe de Estado del 23-F como tiro de gracia a la UCD.

Y llegan las elecciones de 1982, el PSOE (10.127.000 votos) gana las elecciones de calle agrupando socialistas, socialdemócratas, muchos comunistas, liberales y progresistas, y a la mayoría de los indecisos, AP (5.548.000 votos), como segundo partido, con conservadores nacionales y regionales , ultraderecha, a la UCD (1.425.000 votos) y el CDS (604.000 votos), se quedan con los democristianos y socialdemócratas más cercanos a la derecha. Aparte, comunistas PCE (846.000 votos), Euskadiko Ezkerra (EE con 100.000 votos) y nacionalistas CIU (773.000 votos), PNV (396.000 votos), HB (210.000 votos), ERC (138.000).

La mayoría de la sociedad española apostaba por la tranquilidad política culminada con la victoria del PSOE, que dejaba atrás las peleas internas de la UCD, conformaba un partido conservador AP, con un tope menguante como se verá en favor de los nacionalistas o regionalistas, con un núcleo de ultraderecha y ultraconservadores.

La transición política e institucional había superado la crisis económica, a costa de ir debilitándose el partido (UCD) que integraban los sectores más moderados de la sociedad española, pero que no habían sabido formar un corpus ideológico-político. Por abandono, se fueron encuadrando en el PSOE o en AP. El PSOE se convirtió en un partido de gobierno, casi institucional.

Y poco a poco, los nacionalistas se fueron fortaleciendo con los conservadores regionalistas y ultraconservadores o con elementos descontentos de izquierdas antisistema o comunistas. Y con la aceptación institucional que les daba el gobierno de las comunidades autónomas y la colaboración con el PSOE. Íbamos encaminados a un largo periodo de formación del PRI (Partido Revolucionario Institucional mexicano) español, con la colaboración blanda de los conservadores (AP) y la distorsión blanda, a la larga dramática, de los nacionalistas.